Octubre. Falta menos para las vacaciones. Quería decirlo.
Ahora bien, vamos al tema que me convoca a escribirles. El lunes llegué a casa del trabajo, tipo 19 horas, prendí la compu y oHOh! no había Internet. En fin, podía sobrevivir un rato (creo); prendí el tele, y nada: no había cable. Llamo a Multicanal y una máquina me dice que estoy en una zona sin servicio (no me diga!) y que el tiempo estimado para que el inconveniente esté solucionado es de 1 hora 49 minutos. Me dispongo a esperar, a falta de soluciones mejores.
Apróximadamente una hora más tarde, me ataca la desconfianza. Llamo otra vez y la máquina me confirma que sigo en la zona sin servicio y que para poder conectar el MSN (?) tengo que esperar... 1 hora 46 minutos!!! Aprieto un botón que me comunicará con un representante de la empresa, preocupada por la posibilidad de haber entrado en el túnel del tiempo, en la isla de Lost o quién sabe dónde, capaz de hacer que 3 minutos duraran como una hora. Me atienden y me dicen que sí, efectivamente estoy en una zona sin servicios y que tendré que esperar dos horas para que esté solucionado. En fin. So nice, cada vez peor.
Corto y pongo algo de música. A los dos minutos, suena el teléfono. "De Multicanal, señora (ahí le erraron mal). Llamamos para ver si ya se reestableció el servicio". "Ehhhh, no. ¿Ya pasaron dos horas?" "¿No?", me preguntan incrédulos- "Bueno, la molesto en unos minutos". Y en menos de cinco minutos, tenía cable, tenía Internet y tenía la extraña sensación de que si no te conformas con hablar con la máquina y pedís hablar con un representante, la caída de la torre central (que es lo que me dijeron causaba el problema) se soluciona en menos de diez minutos; sino tendrás que esperar dos horas.
A propósito, Sres. Multicanal: cuando a las 23.15 me cortaron otra vez el cable e Internet, no me importó nada. Capusotto está en un canal de aire.