¿Te puedo hacer una pregunta?

Hoy voy a hacer de cuenta que no hay noticias malas. Hoy voy a pensar que mañana Cristina se va a reunir con las Federaciones Agrarias para definir una verdadera política federal y re distributiva. Voy a creer que el Grupo Clarín no salta contra Cristina solo porque los tocaron a ellos, sino porque están a favor de la libertad de expresión. Que el Observatorio de los Medios no es un mecanismo de control sino solo la posibilidad de que mejore la calidad de las transmisiones. Voy a pensar que si la sanción a River por los incidentes es tan leve, sobre todo teniendo en cuenta lo que pasó con Chicago, por ejemplo, es porque, por fin, los dirigentes encontraron la manera de terminar con la violencia y, entonces, las sanciones ejemplificadoras no son ya necesarias.

Y en fin, como no hay noticias malas ni nada por qué preocuparse, hablemos de otros temas. Quienes me conocen saben (y quienes no, sépanlo) que cada tanto me transformo un poco en “el Principito” y se me da por preguntar y cuestionar todo. Estos arranques generalmente vienen acompañados de un anticipatorio: “¿Puedo preguntarte algo?”. No se que espero que me respondan, porque un no no me convence, así que debe ser una simple formalidad la pregunta. En fin, conozco algunos a los que la pregunta ya les genera cierto temor. Hoy pensaba qué cosas nos gustaría preguntar, a personas cercanas, a famosos, a políticos, deportistas, etc, etc. ¿Si tuviéramos la oportunidad, qué preguntaríamos?
Yo pensé algunas (así que después de un “te puedo preguntar algo?”, diría):

A Cristina Fernández de Kirchner: ¿Puede Ud. Dormir tranquila por las noches? Y si me responde que no o que no siempre, preguntaría: ¿Qué cosas le preocupan? (Solo para cerciorarme si realmente eran los colores que se usarán en la próxima temporada, o hay algo más).

Al Che Guevara: ¿Cómo ve la situación actual de Cuba? ¿Volvería a dar su vida por la causa?

A Rodolfo Walsh: ¿Cómo se hace para seguir a pesar de tanta injusticia e impotencia?

Y después, con unas copas de más:

A Scioli: ¿Quiere que le de una mano?

A Kirchner: ¿Por qué no me mira a la cara?

A Pelé: ¿Le preparo un pebete?

A Dios: ¿Existe? Y si me dice que sí: ¿Qué estaba haciendo mientras se armaba todo este despelote en la Tierra???

Ok. Eso es todo. Ahora, sus preguntas.